La soledad de censar marinas

Febrero y Marzo son los meses más duros para censar aves marinas desde cabo. El número de especies es el mínimo del año, por lo que con suerte verás 12 especies comunes, muchas veces ni eso, después de soportar frío, viento, agua y mala luz. Esta sensación es este año más marcada que nunca. El viento azota sin cesar el cabo, y una sucesión de oleajes que superan con ligereza nunca vista los 8 metros, maltrata la roca.

Punta la Vaca (23-2-14)

Además, por alguna razón, censar el paso de aves marinas ya no está de moda en Asturias. Hace años nos podíamos reunir allí 6 o 7 personas sin problema, ahora cuento con los dedos de una mano y me sobran 3, las personas que vamos y casi nunca nos encontramos. Más del 90% de las horas estoy yo solo con el viento y los pájaros.
Creo que la gente sigue pensando que va mucha gente a La Vaca los días verano y otoño, pero ya no es así. Los mismos 2 o a lo sumo 3 van a contar, así que La Vaca es ahora, un lugar solitario para ver pájaros.

Es normal que en estos meses no vaya nadie, o solo algún loco como yo, pero que no vaya nadie de Agosto a Noviembre al lugar en el que se ven más pájaros de Asturias, es curioso.

No es un lugar cómodo, hay que caminar 7 minutos desde el lugar donde dejas el coche por un camino que si ha llovido un poco es de barro, y no hay dónde meterse si llueve, cosa bastante normal en los días que hay buen paso, hace falta telescopio para censar adecuadamente, además hacer fotos es casi imposible con lo que eso supone hoy en día, quizá sea eso lo que mantiene a la gente lejos. Pero hay ventajas, es el mejor lugar de Asturias para ver aves marinas, el año pasado podría estimar entre 1,5 y 2 millones de aves las que han pasado a la vista del que quisiera estar allí, algunas no se podrían ver en otra parte que desde un cabo o un barco, eso no se puede decir de cualquier otro punto de la comunidad sea el que sea.
Todos los años Paco Ríos, Blas López y otros amigos vienen desde Málaga a la Vaca entre otros sitios. En Estaca de bares, acude mucha gente en fines de semana sobre todo a partir de Agosto. En Cantabria y País Vasco también la gente se acerca más que en Asturias, con la larga línea de costa que tenemos.

Suelo enviar un mensaje en este u otros medios animando a la gente a que se acerque, o con previsiones de buenos días para venir, pero me hacen más caso fuera que en casa.

A lo mejor es el tiempo, pero veo el futuro de todo ésto con poca esperanza. Hay poca gente, repito que no más de 3 personas y la mayoría del tiempo solo una dispuestas a sacrificarse por los datos de no solo las aves marinas, sino también de las terrestres que llegan a Peroño.

Hay que decir que nadie nos obliga ni nos paga por estar allí, pero tampoco nadie obliga a la gente a salir a correr aunque esté lloviendo, y la gente sigue haciéndolo. Ésto es solo una afición, pero de las más necesarias.

Para mí, ir a la Vaca es como salir a correr, un paréntesis diario o semanal sentado delante del mar, del que nunca espero nada especial, nada más que estar allí, contar lo que veo y una vez en casa meterlo en la base de datos del observatorio y contarlo aquí y en Trektellen, si coincide que el paso es bueno o se ve alguna especie interesante mejor que mejor, es verdad que trato de elegir el mejor momento consultando mapas isobáricos, o mirando el barómetro, o simplemente fijándome en el aspecto del cielo, eso también lo considero parte del proceso de ver pájaros, pero solo con estar allí me vale.

Así que desde hace 3 años y no sé cuanto tiempo más, La Vaca seguirá siendo un lugar solitario, en el que como mucho encontrareis a Elías o a mí sentado en la punta del cuerno y si hace buen tiempo a los turistas que caminan ajenos al espectáculo que tienen delante.