La falta de lluvias se hace patente en muchas zonas de la cornisa cantábrica. En los últimos años visito el alto Bernesga (Villamanín y Pola de Gordón) y nunca antes había visto al embalse de Arbas tan bajo, toda la cola de Cubillas está seca.
Quedan al aire muchos metros de limos del fondo del embalse, y en ellos me encontré a una espátula jóven que filtraba lo que podía para alimentarse. Había también en sus orillas un correlimos común, una agachadiza y al menos 5 andarríos chicos. Son observaciones interesantes, porque no es fácil ver limícolas o espátula en la cordillera cantábrica a 1300 metros sobre el nivel del mar en un valle plenamente glaciar, era la primera vez que veía a estas especies aquí.
Otras especies más frecuentes fueron 15 cercetas comunes o los siempre presentes somormujos lavancos o cormoranes grandes.
Aun había dos tarabillas norteñas en el entorno del embalse, es una especie que cría aquí, así que podrían ser nidificantes o estar en paso.
La zona está rodeada de picos de entre 1800 y 2000 metros con mucho pastizal subalpino entre medias, así que los bisbitas alpinos son muy abundantes, la especie nidificante mayoritaria por encima de 1400m. Ahora, gran parte de esos bisbitas merodean por las orillas del embalse junto con grandes bandos de pardillos.
Los serbales llevan unos días cargados de bayas, igual que los escaramujos de los rosales silvestres, en esta zona los serbales se quedan en las laderas norte, más húmedas y los rosales dominan claramente al sur de Pajares.