Cuando el anticiclón se encuentra en su posición habitual, las borrascas se cuelan desde Islandia, Irlanda derivando hacia el Sureste, pasando por Francia para ir a desaparecer sobre el Mediterráneo. En este trayecto los frentes asociados nos barren contínuamente, trayéndonos precipitaciones. Al ser los vientos de Oeste-Noroeste, éstas precipitaciones son a menudo en forma de nieve en la Cordillera.
Presión media en Enero. Anticiclón entre Azores y Canarias, dos centros de bajas presiones en Islandia y Mediterráneo, entre ambos flujo de frentes. |
El Anticilón sobre Iberia hace que las borrascas y sus frentes circulen demasiado al Norte. |
Anomalías como la de este año se dan de vez en cuando, no son raras en realidad. Otros años el anticiclón de las Azores está más al Sur de lo normal, siendo entoces los vientos de Suroeste los dominantes, y las temperaturas son aún más altas en Asturias que este invierno, como ocurrió en 2007 y 2008.
La posición de los grandes centros de acción (Anticiclón de las Azores y Borrasca de Islandia) y su persistencia en el tiempo, condiciona la meteorología de cada zona, y la de Asturias en gran medida, al estar en la zona de encuentro de estos dos "interruptores meteorológicos".
Pero los modelos meteorológicos, al fin intuyen un cambio. Es posible que de cara a la semana que viene el tiempo cambie. Si todo transcurre como indican, el anticiclón al fin se moverá, después de un mes. Si se va a su posición habitual, el tiempo se "normalizará". Si se mueve hacia el norte, podría llegar a interrumpir la circulación de vientos del Oeste en el Norte de Europa, y en ese caso el frío se descolgará hacia nuestras latitudes desde el Noreste. Es aún una tendencia, pero al menos se observa un cambio en la dinámica atmosférica de este invierno.
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