La reserva de la Biosfera del Alto Bernesga (Villamanín y La Pola de Gordón) se encuentran en la confluenica del clima Atlántico y Mediterráneo y además el sustrato es muy variado alternándose zonas silíceas y calizas. La presión tanto ganadera como turística es relativamente baja, solo la minería a cielo abierto ha causado importantes destrozos. Ello proporciona un ambiente en el que se asienta una diversidad de fauna y flora muy alta, quizá mayor a los más conocidos enclaves asturianos como Somiedo o el sector de Ubiñas-La Mesa.
Últimamente me estoy centrando bastante en este área, por lo que voy mostrando aquí algunos de los taxones que me van llamando la atención.